Es una verguenza, generar temor en la ciudadanía que reclama su justo derecho, es deber de todos repudiar en todo sentido lo ocurrido y luchar por nuestra dignidad y por el respeto que merecemos.
Es desesperante vivir atemorizados, en una eterna lucha por sobrevivir, los ladrones y los asesinos no deben gobernarnos más.
Un país que mata a sus maestros no es un país, la educación es la herramienta con la que se construye el futuro de todos los Argentinos es nuestra tarea como futuros docentes aportar nuestro grano de arena para construir un país libre, con igualdad de oportunidades y valores.
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Anónimo -